Alejandro Sáez6 min lecturaSigue presionando el Athletic Club en su lucha personal contra el FC Barcelona con motivo del traspaso de Nico Williams. Tras reunirse con LaLiga para tratar el asunto, el conjunto bilbaíno anunció a través de un comunicado que entre los asuntos tratados “se incluyó la capacidad de incorporación de jugadores por parte del FC Barcelona, habida cuenta del interés legítimo del Athletic Club para acceder a la información correspondiente”, después de que Deco, director deportivo del conjunto azulgrana, reconociera que van a tratar firmar al pequeño de los Williams.
“Ocuparnos de lo nuestro es velar porque las reglas de la competición se cumplan”, apostilla el comunicado del Athletic Club en respuesta al Barcelona, que sigue con su estrategia de tratar de firmar a Nico Williams sin tener que abonar de una tacada los 62 millones de euros -IPC sumado- de la cláusula de rescisión del futbolista, como es intención de los rojiblancos.
Un FC Barcelona que por ahora sigue sin estar en la regla 1:1, por lo que hoy por hoy no se encuentra en los parámetros de dicha regla para la inscripción de futbolistas. Un inconveniente ‘menor’, teniendo en cuenta las intenciones blaugranas y que aún hay suficiente tiempo por delante como para que los azulgranas acaben cuadrando sus cuentas.
En el FC Barcelona, por su parte, defienden que no entienden la postura de los rojiblancos, pues abonar una cláusula de rescisión es una práctica que se ha hecho siempre en el fútbol. Es decir, que al Barça no le quedará más remedia que abonarla, como es su deseo, visto que negociar el pago fraccionado de la misma no es posible por parte de los de San Mamés.
Dando por hecho que más pronto que tarde se acabará cerrando el traspaso de Nico Williams bajo el pago de su cláusula, ahora toca el momento de analizar qué es lo que hará el Athletic Club con esos 62 millones de euros.
En primer lugar está la intención de recuperar a Aymeric Laporte, quien ha vivido una temporada más que discreta en el Al-Nassr de Arabia Saudí, por lo que a sus 31 años está por la labor de volver a Europa, siendo el Athletic Club de Champions un destino muy suculento.
El Al-Nassr pagó 27’5 millones de euros por él al City, rondando su fichaje por el conjunto bilbaíno unos 15 millones de euros. La operación no será barata, puesto que el zaguero se embolsaría unos 15 millones de euros más de seguir el próximo curso en el fútbol de Arabia Saudí. Una cantidad que, lógicamente, no puede igualar el Athletic, que en cualquier caso haría un esfuerzo económico importante para tratar de seducirlo en su retorno.#[relacionada;multiple;[proveedor:0;id:498148,501350,498395]]
Irónico, cuanto menos, es el movimiento que tendrá que hacer el Athletic para firmar a otro de sus objetivos este verano. Mientras que pleitea con el FC Barcelona por la cláusula de Nico Williams, otro de los futbolistas en su radas es el osasunista Jesús Areso, quien ha rechazado todas las ofertas de renovación rejillas hasta la fecha, como reconoció el propio Braulio, director deportivo de Osasuna.
El propio Braulio, en la presentación de Lisci como técnico rojillo, confirmó que están esperando que se abone su cláusula de rescisión, que es de 12 millones de euros. “Es cierto que él ha rechazado oferta de renovación y obviamente lo normal es que salga, porque o bien renueva con nosotros, cosa que él rechazó varias ocasiones y no soy capaz de entender que pueda acabar el año y se vaya a terminar libre, no lo creo capaz porque sé mucho que quiere al club”, dijo Braulio.
Otro jugador de la plantilla de Osasuna en el radar del Athletic Club es el mediapunta Aimar Oroz, cuya cláusula es de 30 millones de euros. A diferencia de Areso, su contrato está en vigor hasta 2029, por lo que los rojillo tienen una situación de poder en la negociación. Interés de desprenderse de él no hay ninguno, por lo que las relaciones entre Athletic Club y Osasuna en materia de fichajes este verano se antojan tensas.
Mientras que el movimiento por Laporte se antoja más claro -incluso independientemente de que Nico Williams, hipotéticamente, no acabara saliendo- más complejos serán los contactos con Osasuna. Habrá que ver cómo quedan estos dos intereses por parte del Athletic Club.